UNA PRINCESA QUE SE ENCONTRÓ CON EL ALCOHOL

Hace un tiempo, una mamá me llamó muy asustada porque le avisaron que su hija últimamente se había puesto "muy mal" en las fiestas, había hecho tonterías y terminó vomitando. Al parecer sus amigos y las otras mamás sabían que ya estaba teniendo problemas con el alcohol.

¿Qué hablamos?

Efectivamente tomaba poco alcohol, pero se le subía rápido y se ponía más alegre de lo normal, recordaba que después de dos vasos la última vez, terminó aventándose en la alberca, bailando en la mesa y vomitando, ella no entendía porque si solo fueron dos vasos y fue lo más que ha tomado, nunca ha superado esa cuota. En cambio, sus amigos “los niños” toman hasta diez vasos y no les pasa nada.

Le expliqué de la siguiente manera

La molécula de alcohol es como un lego pequeño: alguna vez has visto los legos para bebés, son grandes y te dan pocas piezas, conforme van creciendo hay legos más chicos, los más avanzados son para jóvenes y son pequeños y puedes armar castillos o lo que quieras con ellos, incluso un príncipe fiel.

¿Qué pasa si le das un lego para grandes a un bebé?, claro que me respondió - se lo traga-. Así, el bebé no está preparado ni desarrollado para entender y usar correctamente el lego pequeño. De la misma manera el cuerpo de un adolescente no está listo para procesar bien el alcohol porque su molécula es muy compleja y la forma en que el metabolismo la absorbe aún no tiene todas las capacidades para hacerlo bien.

Las mujeres son más vulnerables

Le platiqué también que se ha comprobado que la anatomía de la mujer es más vulnerable al alcohol, es más probable que le haga más daño en comparación con sus amigos hombres, me puso el ejemplo de varios amigos que tomaban lo mismo y más que ella y en cambio a ella le afectaba más, vimos que el mecanismo de absorción en mujeres es más lento entre otras características físicas. Está comprobado que el metabolismo de la mujer es más vulnerable y “menos eficiente” en procesar el alcohol, especialmente en la adolescencia.

“Entonces sé consciente que sí quieres competir con ellos por ahora podrás seguir el ritmo, pero con el tiempo te hace más daño a ti y te pone en mayor riesgo”.

Mtro. Uziel Morales Amaya

uziel_moam@hotmail.com