Hechizo del padre por la noche: cómo ser buen padre con poco tiempo
- Uziel Morales Amaya
- 6 nov 2018
- 2 Min. de lectura

Una de las realidades en nuestro país y en las familias es que el padre de familia muchas veces trabaja en horarios extensos, la mayoría ocupa la mañana y vuelve a casa por las noches, le restan un par de horas para convivir con sus hijos. A veces se les juzga como malos padres especialmente en las redes sociales. Es una crítica injusta y lo mismo aplica para madres trabajadoras, ya que la economía familiar depende de ello, sin esta la familia no podría subsistir ni crecer.
A pesar de ser un escenario complicado existe una forma altamente valiosa para ser un buen padre a pesar de tener poco tiempo activo con los hijos. Existe una creencia de que se educa de día, y si no fuera del todo cierto, y encontramos que en la noche las horas y las vivencias valen lo mismo.
Acompañar el comportamiento nocturno
A pesar de que la carga pesada está en el día, la escuela, las tareas, el hogar, en la noche el tiempo tiene minutos y valen lo mismo que en el día. Una forma de acompañar a los hijos es involucrándose en su sueño, pasar una noche en la misma cama, durmiendo con el hijo el padre podrá darse cuenta de muchas cosas, esto porque en el sueño el niño es auténtico, no tiene máscaras, ni se oculta, hay todo un comportamiento nocturno que al padre le permitirá involucrarse en las vivencias de su hijo.
Por ejemplo, cuando están bajo una fuerte cantidad de estrés, los niños suelen tronar los dientes, quejarse, despertarse a media noche, hacerse pipi. Ante estos comportamientos el padre puede sensibilizarse de su vivencia y buscar la fuente de tal estrés, lo primero es acompañar en este comportamiento nocturno, ser el padre el que lleve al niño al baño, el que lo abrace, el que lo tranquiliza para que vuelva a dormir; al niño le genera una sensación de protección diferente al que le provee su madre, ya que siente un regazo donde recargarse, las inseguridades y todos los fantasmas desaparecen con el hechizo del padre.
El padre se involucra y deja como pendiente para el amanecer compartir la vivencia nocturna con el niño, retomar lo vivido, en lugar de preguntar ¿Cómo te fue en la escuela?, mejor ¿Cómo nos fue anoche?, te sentí asustado, pero estuve contigo, te sentí preocupado no te apures te ayudamos entre todos.
Un consejo práctico es que el padre tenga el WhatsApp de su maestra(o) e involucrarse en los pequeños hallazgos nocturnos que ha descubierto y mensajear a la maestra, ¡hola miss, he notado que Pablito ha estado algo preocupado, estoy pendiente si puedo ayudar en algo!, un grato mensaje que la maestra valorará, y que extiende la cobertura del padre, ese regazo qué hace el hechizo todas las noches para que los monstruos dejen en paz al pequeño.
¡Se puede ser buen padre a pesar de contar con poco tiempo!, la noche es una oportunidad, luego escribiremos sobre otras formas. Aquí seguimos para apoyar a la comunidad de padres.
Comments